FORMAS QUE YA NO CONTIENEN
Hace cinco décadas Graham Greene, en “Nuestro Hombre en La Habana”, pudo recrear el perfil de un solitario espía que poco a poco construía para consumo de sus jefes, un mundo basado en mentiras, medias verdades, suposiciones, prejuicios, rumores, etc. Greene según algunos de sus biógrafos fue miembro del servicio secreto inglés, o sea que…